Mantener la salud esquelética después de los 40
La densidad ósea disminuye naturalmente con la edad, por lo que cuanto mayor sea, mayor será su riesgo de padecer afecciones como osteoporosis, osteoartritis y artritis reumatoide. Las mujeres sedentarias también corren más riesgo. Además, hay ciertos factores de estilo de vida que aumentan las posibilidades de tener huesos debilitados, como fumar, beber demasiado alcohol o cafeína y llevar una dieta baja en minerales.
Además, ciertos medicamentos pueden debilitar sus huesos. Estos incluyen antiácidos que contienen aluminio, algunos anticonvulsivos, ciertos medicamentos para reducir el colesterol y varios otros. Asegúrese de hablar con su médico y leer el prospecto cuando se prescribe un medicamento para averiguar sus efectos secundarios.
Los resultados del estudio SDSU (publicado en 2003), que midió la densidad ósea de 27 ciclistas expertos, mostró a los investigadores cuán significativamente pueden deteriorarse los huesos cuando no están sujetos a los rigores de actividades de carga como correr o levantar pesas.
Artritis reumatoide
Aunque los médicos no conocen la causa exacta de la artritis reumatoide, se cree que es una enfermedad autoinmune en la que el sistema inmunitario comienza a atacar sus propios tejidos. Las zonas más afectadas son las manos y los pies, seguidas de las rodillas, las muñecas, el cuello y los tobillos, aunque la enfermedad puede afectar a cualquier articulación del cuerpo. Los síntomas iniciales pueden incluir fatiga y fiebre, seguidos de rigidez e hinchazón de las articulaciones. El dolor articular puede volverse tan severo que restringe el movimiento y, en casos severos, los huesos pueden fusionarse, haciendo que la articulación sea imposible de mover.
La artritis reumatoide afecta más a mujeres que a hombres (en una proporción de 3:1) y suele aparecer entre los 40 y 50 años, aunque también puede aparecer en personas más jóvenes y suele ir acompañada de anemia leve.
Tratamiento de los síntomas de la artritis reumatoide
Siempre debe recibir un diagnóstico y tratamiento médico convencional para la artritis reumatoide. Los médicos pueden recomendar medicamentos inmunosupresores o, en casos graves, reemplazo de articulaciones. Las terapias complementarias pueden ser útiles para aliviar los síntomas. Los terapeutas dietéticos pueden recomendar limitar las grasas animales en la dieta y tomar suplementos como multivitaminas, vitaminas B, vitamina C, vitamina E (excepto cuando se toman medicamentos anticoagulantes), sulfato de glucosamina y zinc. También se puede recomendar una dieta de eliminación si se sospecha que la afección está relacionada con una intolerancia alimentaria. La movilidad de las articulaciones se puede ayudar nadando, y el dolor se puede aliviar aplicando calor suave en el área.
osteoartritis
A medida que las articulaciones envejecen, se vuelven propensas a la osteoartritis. El cartílago de la articulación se desgasta y los extremos de los huesos pueden frotarse entre sí y desarrollar crecimientos que se conocen como espolones. Los síntomas incluyen dolor en las articulaciones que se exacerba con el movimiento, rigidez por la mañana y crecimientos óseos en los dedos.
La artrosis suele afectar a las articulaciones que han estado sujetas a un desgaste excesivo. Es común en las articulaciones que soportan peso que se han usado en exceso en el pasado. Arrodillarse demasiado, por ejemplo, puede causar artrosis de rodilla. No existe una cura definitiva para la osteoartritis; el tratamiento consiste principalmente en el alivio del dolor y, en ocasiones, la cirugía de reemplazo articular. El sobrepeso genera una tensión innecesaria en las articulaciones, por lo que una parte importante del cuidado preventivo es mantener un peso saludable o perder peso si es necesario. Trate de mantener sus articulaciones lo más fuertes y flexibles posible haciendo ejercicio con regularidad. Una dieta saludable baja en grasas saturadas y rica en aceites de pescado también puede ser útil.
Acción de apoyo para la artrosis
Se cree que las sustancias nocivas conocidas como radicales libres pueden desempeñar un papel importante en la artritis. Tomar un suplemento antioxidante puede ayudar a combatir el daño de los radicales libres en las articulaciones. Los terapeutas dietéticos también recomiendan tomar un suplemento diario de ácido gamma-linolénico (GLA). Si sufre de osteoartritis, debe evitar tareas como llevar bolsas pesadas que ejerzan tensión y esfuerzo innecesarios en las articulaciones afectadas. Nade regularmente y consulte a un fisioterapeuta sobre ejercicios específicos para prevenir el desgaste muscular alrededor de las articulaciones afectadas. Los tratamientos complementarios útiles que puede probar incluyen la osteopatía y la atención quiropráctica.
Problemas de espalda
A medida que envejece, el estrés diario y las tensiones en la columna pueden acumularse y provocar problemas crónicos de espalda. Las personas más propensas a sufrir son los trabajadores manuales, los oficinistas, los obesos y los ancianos. El dolor de espalda generalmente es causado por una distensión muscular o de ligamentos o por problemas de disco.
Evitar quejas de espalda
La piedra angular del cuidado preventivo es el ejercicio regular que fortalece los músculos de la espalda. Tanto la natación como el yoga son excelentes. También debe prestar mucha atención a su postura al sentarse, pararse y acostarse. Si trabaja en un escritorio, asegúrese de que esté a una altura cómoda y que su silla apoye su espalda baja. Tenga cuidado al levantar objetos pesados: doble siempre las caderas y las rodillas, apoyando el peso en las piernas y manteniendo la espalda recta. Nunca levante y gire al mismo tiempo.
Aliviar el dolor de espalda
Si tiene dolor de espalda, hay varias cosas que puede hacer para aliviar el dolor.
- Acuéstese boca arriba con las rodillas dobladas.
- Aplique una compresa fría en el área afectada.
- Haz una compresa tibia de aceites esenciales de manzanilla, romero, eucalipto y lavanda. Dejar hasta 8 gotas de aceite esencial por cada 100ml de agua caliente. Remojar la muselina en el agua y el aceite, escurrir el exceso y aplicar en la espalda. Coloque una toalla caliente sobre la compresa y déjela actuar durante al menos 2 horas. (El eucalipto puede causar irritación en la piel, así que úselo con moderación).
- Los baños calientes pueden aliviar el dolor.
- Asegúrese de que su espalda esté bien apoyada en la silla y el colchón.
- Duerma de lado con las rodillas dobladas y una almohada entre ellas (o boca arriba con almohadas debajo de las rodillas).
Descargo de responsabilidad
El Contenido no pretende ser un sustituto del consejo, diagnóstico o tratamiento médico profesional. Siempre busque el consejo de su médico u otro profesional de la salud calificado con cualquier pregunta que pueda tener con respecto a una condición médica.