5 hábitos alimenticios que te impiden perder peso
El efecto de las dietas es temporal. Cuando no sigues la dieta y las restricciones nutricionales, los kilos perdidos vuelven. Para guardar resultados que no se debiliten, necesita cambiar constantemente su rutina diaria, especialmente sus hábitos que le impiden perder peso.
Aquí una lista de los más significativos:
- bebes demasiado
El agua pura es buena para el cuerpo, pero las bebidas son sinónimo de aumento de peso. Las gaseosas contienen mucha azúcar añadida, que se convierte en grasa en el hígado y aumenta la grasa abdominal.
Los refrescos dietéticos son tan dañinos como los demás: sus edulcorantes artificiales tienen muchos de los mismos efectos negativos sobre el metabolismo y el apetito.
Además de los refrescos, trate de evitar el alcohol. Contiene muchas calorías adicionales y puede causar la formación de grasa abdominal e hígado graso, lo que afecta el metabolismo. Además, cuando bebe vino u otras bebidas alcohólicas, come más de lo que pretendía.
- No haces preparación de comidas.
Las personas ocupadas son las mismas: desayunar una taza de café con un croissant, comer un sándwich en el trabajo y cenar una pizza congelada con salami y queso. Vivimos cada vez más rápido y, como resultado, la comida casera está siendo reemplazada gradualmente por comidas preparadas. En este caso, no se sorprenda si ve kilos de más en la báscula. Los alimentos preparados son alimentos que tienen un alto contenido de grasa y sal y tienen más calorías que los alimentos saludables preparados en casa.
Si desea perder peso, comience a preparar comidas o platos completos con anticipación. Esto no solo puede mejorar su forma, sino también ahorrarle dinero y una cantidad significativa de su tiempo.
Hay varias opciones para principiantes, comenzando con la preparación de comidas. En primer lugar, puede hacer lotes durante meses. Puede congelarlos y almacenarlos durante el tiempo que sea necesario y posible. Algunos alimentos duran mucho y se pueden recalentar sin perder vitaminas y minerales esenciales.
La segunda idea que puedes poner en práctica son los ingredientes listos para cocinar. Por ejemplo, si ya ha preparado todos los ingredientes para la ensalada, puede terminar de cocinar en cualquier momento. Para que no se eche a perder demasiado rápido, y puedes mezclar todos los ingredientes tan pronto como quieras hacer un refrigerio.
Preparar comidas para bajar de peso es una práctica obligatoria para quienes tienen poco tiempo libre. Te mostraremos lo fácil, rápido y saludable que es.
- refrigerios frecuentes
Los refrigerios frecuentes conducen a un exceso de calorías y a un aumento de peso no deseado. Incluso los alimentos saludables pueden ser dañinos. Por ejemplo, las nueces están llenas de grasa y las frutas secas contienen mucha azúcar. Puedes comerlos, pero con moderación.
Si desea perder peso y concentrarse en resultados positivos, rechace los refrigerios frecuentes durante el día.
Para mantener al mínimo los refrigerios poco saludables, no se salte el desayuno. La sensación de hambre desencadena el deseo de comer y provoca frecuentes meriendas diarias. Siempre trate de comer tres comidas completas y balanceadas al día, cada una con una dosis saludable de proteínas, carbohidratos, vegetales y grasas.
- Agregas salsas poco saludables
Está comiendo alimentos sanos y equilibrados, pero ha notado que está aumentando de peso. ¿Cuál es el problema? La respuesta es condimentos poco saludables. Contienen muchos aditivos, incluidos conservantes, que son perjudiciales para la salud. Algunas salsas, como el ketchup comprado en la tienda, la salsa barbacoa o la mostaza, tienen mucha azúcar y sal agregadas, lo que conduce al aumento de peso. La mayonesa, por otro lado, es rica en grasas y calorías, lo que aumenta su peso.
Niéguese a usar sabores para evitar las calorías adicionales. Reponga sus comidas con jugo de limón, yogur griego y agregue especias o hierbas.
- La comida como premio o como castigo
Comer un plato de helado puede ser una panacea para todos los males, pero solo en una película. En realidad, solo agrega pulgadas adicionales a la cintura y libras adicionales en la báscula. Cuando estás triste, deprimido o demasiado nervioso, sientes hambre, pero es solo una reacción biológica del cuerpo. El estrés hace que las glándulas suprarrenales secreten cortisol, una hormona relacionada con el estrés, que desencadena la necesidad de comer alimentos azucarados, salados o grasos. En situaciones estresantes, lo mejor es evitar la comida y practicar deportes, ya que ayuda a controlar el estrés. El ejercicio hace que su cuerpo libere endorfinas, las sustancias químicas que se sienten bien en su cerebro que mejoran el estado de ánimo y alivian el dolor y el estrés.
Lo mismo con el buen ánimo. Si es tu día de suerte y has tenido éxito en el trabajo, no lo celebres con un postre alto en calorías. Te lo comerás y luego te arrepentirás de estar fuera de tu dieta. Recompénsate con algo tangible que te dé buenas emociones e impresiones positivas, como un par de jeans nuevos, una libreta nueva o boletos para un concierto.
Descargo de responsabilidad
El Contenido no pretende ser un sustituto del consejo, diagnóstico o tratamiento médico profesional. Siempre busque el consejo de su médico u otro profesional de la salud calificado con cualquier pregunta que pueda tener con respecto a una condición médica.